Según analistas locales, el ojo del asunto está en que la alianza de los partidos Acción Nacional (PAN), Revolucionario Institucional (PRI) y de la Revolución Democrática se lanzó con todo para impedir la nominación de García, un joven político del Movimiento Ciudadano (MC), con las condiciones para arrastrar votos de la candidata de ese trío, Xóchitl Gálvez.
Al mismo tiempo, si no lograban ese propósito, eliminar a MC de la gobernación regiomontana en la que ya habían instalado a uno de ellos, Luis Enrique Orozco, como mandatario interino por el Legislativo dominado por el PRI y el PAN pero, aunque lo intentó de varias maneras, nunca pudo lograrlo.
A Gálvez no le quedó otra alternativa que renunciar a su candidata para impedir que el estado cayera en manos que no le corresponde
En esos momentos, el PRI presionó al máximo a García para que declinara en favor de Xochitl, y una vez que reasumió la gobernación mostró una carta que le enviaron proponiéndole que él podía irse a hacer campaña por la Presidencia de la República, a cambio de dejarles el gobierno de Nuevo León.
A ese chantaje García respondió en lenguaje coloquial: “Ni madres, se roban todo” y aprovechó para enumerar hechos ilegítimos como evasión de impuestos e hizo un recuento de todas las obras construidas bajo su gobierno que no pudieron hacer en 40 años.
Y seguidamente leyó partes de los 11 puntos o condiciones para que lo dejaran tranquilo, facilitar dinero, que él eliminara los procesos judiciales en curso a personajes destacado s de la farándula política de Nuevo León a quienes calificó de puros bandidos, no pagar impuestos por cinco años para limpiar a esas ratas, expresó
El gobernador de MC aseguró que no pudo dejar a Javier Navarro como encargado de gobierno interino porque para aprobarlo el Prian le pedía la Fiscalía, la Auditoría Superior del estado, mucho dinero en el siguiente presupuesto y sobre todo impunidad.
mem/lma