Según el departamento de estudios de organizaciones sociales de la UCU, los conflictos de trabajo fueron 14,43 por ciento superiores a los de 2022.
La aprobación de la polémica reforma jubilatoria desató contradicciones laborales y sindicales y contribuyó a que 2023 resultara el de mayor conflictividad de las últimas dos décadas.
De acuerdo con el informe de la UCU, en el transcurso del cuarto año de mandato de Luis Lacalle Pou “se registraron 118 conflictos con interrupción de actividades”, que ocasionaron la pérdida de un millón 564 mil 621 jornadas laborales, afectando a un total de un millón 700 mil 870 trabajadores.
La mayoría de los encontronazos ocurrieron en el sector de la construcción, seguido del de la educación, por la oposición a la transformación educativa impulsada por el gobierno e incidentes en varios planteles, incluidas ocupaciones.
En el año tuvieron lugar cinco paros convocados por la central sindical PIT-CNT, dos de ellos generales y el resto parciales.
lam/ool