Al hacer un balance de los logros alcanzados, el INAH considera que 2023 fue uno de los años más fructíferos en el desarrollo de sus tareas sustantivas en la protección, investigación, conservación y difusión del patrimonio cultural.
Señala que en el marco del proyecto prioritario del Gobierno de México Tren Maya, este año el instituto concluyó las labores de salvamento arqueológico tanto en el derecho de vía como en las zonas de amortiguamiento de este medio de transporte, el cual conectará a los estados de Chiapas, Tabasco, Campeche, Yucatán y Quintana Roo.
Paralelamente, explica, se reforzó el Programa de Mejoramiento de Zonas Arqueológicas (Promeza), mediante la inclusión de la ciudad antigua de Cobá y de sitios para su puesta en valor, como el corredor ecoarqueológico Paamul II, donde se ubican las cuevas Ocho Balas, Manitas y Garra de Jaguar.
Informa que en 10 de las 29 zonas arqueológicas incluidas en el Promeza se construyen Centros de Atención a Visitantes para mejorar la experiencia turística y dar opciones de desarrollo a las comunidades cercanas a estos sitios.
Otras acciones del Promeza, en 2023, fueron la apertura de nuevas áreas para la visita pública, como Chichén Viejo y El Palomar, en Chichén Itzá y Uxmal, respectivamente; la atención del Palacio, el Grupo IV, la tumba de Pakal y el Templo de la Cruz Foliada, en Palenque.
También la construcción de ocho nuevos recintos museográficos, entre ellos el Gran Museo de Chichén Itzá, el Museo Arqueológico del Puuc, en la Zona Arqueológica de Kabah, y el Museo de la Costa Oriental, en Tulum.
En cuanto a hallazgos registrados gracias al Promeza, resalta el de una cámara funeraria en Palenque; las representaciones en piedra de un atlante y del rostro de un guerrero, en Chichén Itzá; un chultún –depósito de agua– reusado como cripta, y la imagen pétrea de un cautivo, en Ek’ Balam.
Refiere que el instituto también tuvo hallazgos en otros salvamentos arqueológicos, como en el del Trolebús Chalco-Santa Martha, en Estado de México (Edomex), donde se recuperó una máscara de cerámica fechada hacia el Posclásico Tardío (1400-1521 d.C.); y en la Línea 3 del Cablebús, en la Ciudad de México, donde se descubrieron 10 tumbas de tres mil 500 años de antigüedad.
Otros hallazgos registrados fueron: una segunda imagen de la Joven gobernante de Amajac, en Álamo Temapache, Veracruz; el huevo fosilizado de un flamenco, en el yacimiento paleontológico de Santa Lucía, Edomex.
Además, una ofrenda de 15 figurillas de piedra verde, recuperada en el Templo Mayor, en la Ciudad de México, y la escultura de un Chac Mool en Pátzcuaro, Michoacán.
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