La embarcación podría permanecer anclada hasta 20 días, por segunda vez, luego de una medida similar aplicada a la misma a mediados de noviembre del pasado año, también por “alargar el viaje hasta el puerto seguro para otro rescate”, señala una nota divulgada en el sitio digital informativo del canal televisivo Rai News.
El Ocean Viking, operado por la organización humanitaria europea SOS Mediterranée, llegó el domingo al puerto de Bari, donde desembarcó a 244 migrantes, y fue acusado de violar la orden de “dirigirse sin demora, a máxima velocidad y siguiendo una ruta directa” hacia el puerto seguro asignado para el desembarco de inmigrantes.
En respuesta a esa medida, SOS Mediterranée, entidad con oficinas en Suiza, Francia, Alemania e Italia, argumentó a través de un portavoz que difícilmente puede considerarse que “rescatar a 70 inmigrantes en dificultades en un barco a sólo 15 millas náuticas de distancia representara una violación de esas instrucciones”.
En declaraciones formuladas el 31 de diciembre último al diario La Stampa, el ministro del Interior italiano, Matteo Piantedosi, admitió que, pese a las medidas aplicadas por su gobierno durante 2023, se elevó a 115 mil 754 el número de inmigrantes que desembarcaron en ese año, cifra muy superior a la de 103 mil 846, de igual período anterior.
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