El zurdo no trabajaba en campeonatos cubanos desde 2021, cuando vistiendo el uniforme de su Pinar del Rio natal realizó dos salidas en la postemporada sin aceptar imparables y con cinco ponches propinados.
Luego de siete campañas en la Tierra del Sol Naciente, donde apenas le han anotado 1.95 carreras limpias cada nueve entradas y ha ponchado a 422 contrarios en 300.1 capítulos, sufrió una lesión este año que lo alejó de los terrenos.
El pasado mes de julio, quien fuera líder en holds (40) en 2020 en aquella fuerte liga asiática, fue operado con éxito de una osteocondritis disecante en el codo de su brazo de lanzar.
Parte de su rehabilitación fue dirigida por el célebre profesor José Manuel Cortina, conocido como “El reparador de sueños”, por la cantidad de brazos que ha recuperado en su larga carrera deportiva.
«Ha sido una recuperación bien larga, empecé en Japón, después vine para acá con el profesor Cortina, estuve entrenando más de dos meses con él hasta finales de diciembre, haciendo bullpen, trabajando mucho en la recuperación de mi brazo, y ya estoy al 100 por ciento se puede decir», declaró hace unos días al canal de Youtube de los Cazadores de Artemisa.
Esas afirmaciones quedaron demostradas hoy cuando se encaramó en la lomita de lanzamientos y enfrentó a ocho bateadores de Industriales, ponchó a la mitad de ellos y ninguno pudo conectarle indiscutible.
Su presencia en las filas de los Cazadores, que han vencido en los dos partidos disputados frente a los capitalinos, será primordial para que ese equipo pueda llegar a una final por primera vez en su historia.
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