Los acusados son la tía del menor, Carmen Jiménez, y su pareja Valentín Rojas, quienes la noche del pasado sábado llevaron a la víctima al hospital del distrito Verón, Punta Cana, sin signos vitales.
Según las autoridades, el niño presentaba signos de tortura y mutilación, y murió tras sufrir múltiples heridas, shock hemorrágico y séptico.
Diario Libre publicó que durante el interrogatorio la pariente admitió la culpa y alegó que el niño- bajo su cuidado-, molestaba mucho y rompía objetos en la casa.
Precisó que utilizó un cuchillo, un machete, un cable para amarrarlo y otras herramientas para golpearlo.
Mientras, el padre del niño, Santiago Colomé Jiménez, declaró que confió a su hermana el cuidado de su hijo y precisó que le depositaba seis mil pesos dominicanos (unos 100 dólares) cada 15 días para su manutención. También reconoció que no lo veía desde noviembre último.
Trascendió que el caso es investigado por un equipo de seis fiscales encabezado por la titular Claudia Garrido.
El fiscal Hendrich Ramírez manifestó que las averiguaciones apenas comienzan, pero explicó que el Ministerio Público acogió la solicitud de la medida de coerción consistente en 18 meses y lograron la declaración de caso complejo porque probaron la culpabilidad de los implicados.
Jiménez cumplirá la pena en la cárcel de mujeres de Higüey, mientras que Rojas la hará en la cárcel CCR-14 de Anamuya.
A ambos el Ministerio Público los acusa de violar varios artículos del Código Penal, así como la ley 631-16, para el Control y Regulación de Armas, Municiones y Materiales Relacionados.
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