Según refiere un informe de la entidad financiara, en ese periodo se registra una expansión impulsada por el buen desempeño de la mayoría de los sectores económicos y la demanda interna, al tiempo que la tasa de ocupación permanece estable y la inflación se reduce.
El BCN hizo referencia al predominio de los riesgos asociados a la geopolítica, la desaceleración económica global y la prolongación de condiciones financieras internacionales estrechas, y añadió que la economía nicaragüense se mantiene resiliente, respaldada por políticas macroeconómicas adecuadas.
De acuerdo con el documento, el Índice Mensual de la Actividad Económica de noviembre del año pasado, mostró un crecimiento de 4,7 por ciento en términos acumulados, impulsado por hoteles y restaurantes, explotación de minas y canteras, energía y agua, comercio, intermediación financiera y construcción.
“Por el enfoque del gasto, según el Producto Interno Bruto (PIB) al tercer trimestre de 2023, la actividad económica creció 4,5 por ciento en términos acumulados, determinado por la demanda interna, con crecimiento del consumo y la inversión”, precisó.
Al mencionar la tasa de desempleo, el informe del BCN señaló que permanece baja, ubicándose en noviembre en 3,9 por ciento, acompañada de estabilidad en el empleo formal.
Resaltó que la afiliación al Instituto Nicaragüense de Seguridad Social aumentó en ocho mil 529 afiliados en 2023, alcanzando un total de 791 mil 913 asegurados en diciembre.
Sobre la balanza de pagos, el escrito aseguró que Nicaragua registra superávit en la cuenta corriente, impulsado por el dinamismo en los flujos externos relacionados con las remesas familiares, exportaciones de mercancías y turismo.
El BCN proyectó el crecimiento económico del 2023 en un rango de entre cuatro y cinco por ciento, y espera que este año se sitúe en entre 3,5 y 4,5; mientras la inflación para 2024 se espera converja entre tres y cuatro por ciento.
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