Unos 60 mil metros de cables, 300 armarios de distribución en la vía pública, 65 torres de alta tensión y 61 estaciones transformadoras (ET) de energía fueron vandalizados o robados de la red técnica del país, detalló el director de la oficina de Comunicación, Marketing y Relaciones Institucionales de ENDE, Lauro Fortunato.
En declaraciones a la Agencia Angoleña de Prensa (Angop), el portavoz reveló que estas acciones se produjeron con mayor frecuencia en las provincias de Luanda, Bengo, Benguela, Lunda-Sul y Huíla.
La ENDE colabora con los órganos policiales y judiciales para identificar y responsabilizar a los autores, así como para reducir estos actos delictivos, un asunto considerado de gran relevancia en el país.
El pasado mes de noviembre el ministro de Estado y jefe de la Casa Militar del Presidente, Francisco Furtado, consideró la vandalización de las torres de alta tensión como acciones de sabotaje selectivo que deben ser categorizadas como terrismo.
En tal sentido, indicó que las fuerzas de seguridad y defensa lucharían para neutralizar a los grupos que crean situaciones de inestabilidad para hacer inviable el desarrollo del país.
Angola tiene una tasa de electrificación del 43 por ciento y en 2023 al menos 89 mil familias recibieron por primera vez el suministro de energía, el 42 por ciento de ellas en la capital, Luanda, dijo Fortunato.
La ENDE es exclusiva en la distribución y comercialización de electricidad en el país.
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