La iniciativa “Hambre Cero en las Escuelas”, sometida al Legislativo por el presidente Santiago Peña en beneficio del sistema de nutrición estudiantil desfinancia también programas esenciales al eliminar el Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo (Fonacide), opinó el diario.
En medio de la incertidumbre sobre el alcance del nuevo proyecto de ley –subraya el diario- el Ejecutivo dispuso que los 250 millones de dólares anuales de compensación de Brasil por la hidroeléctrica binacional de Itaipú sufraguen el almuerzo escolar, aunque cesarán recursos para entidades como Salud y Becas.
El proyecto, que centraliza los recursos con la creación del Fondo Nacional de Alimentación Escolar (Fonae), concentra en una sola caja todo el dinero para esos fines, centraliza el almuerzo escolar y golpea al presupuesto dedicado a esos y otros sectores, explicó Última Hora.
Los recursos del Fonae –subraya el diario- estarán en poder del Ministerio de Desarrollo Social, que concentrará toda la gestión, licitaciones y distribución de los recursos destinados a las gobernaciones, aunque excluye del manejo de dinero al Ministerio de Educación y a los intendentes.
El proyecto Hambre Cero en las Escuelas establece la universalización de la alimentación para alrededor de un millón y medio de estudiantes, los 180 días del año lectivo.
La nueva política –reflexiona el diario- deja sin finanzas al Fondo para la Excelencia de la Educación y la Investigación, que, a su vez, subvenciona al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología y a entidades como la Agencia Financiera de Desarrollo y otros proyectos de infraestructura educacional.
El Gobierno aclaró sobre sectores sensibles desplazados ahora de los referidos fondos, que les serán garantizados mediante el Ministerio de Economía y Finanzas.
La jefa de Gabinete, Lea Giménez, explicó que la misión de esa cartera será buscar financiamiento para estas instituciones, hasta que en 2025 el Estado estudie el nuevo presupuesto.
Por su parte, el presidente Peña calificó al Fonacide como un fracaso desde su creación hace diez años, sobre todo en el manejo de la alimentación, “que fue un descalabro, según confirmó un informe de la Contraloría”.
El titular de la Cámara de Diputados, Raúl Latorre, respaldó el proyecto y resaltó que este apunta a lograr que la alimentación escolar básica pase del 5 al 100 por ciento de cobertura de la plantilla total de estudiantes durante los 180 días de clases del año lectivo.
La embajadora paraguaya ante la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Nancy Ovelar, por su lado, celebró en declaraciones a radio 780 AM el proyecto, “que busca combatir la desnutrición infantil y el ausentismo en las instituciones educacionales”.
“Para mi es una noticia alentadora –enfatizó- porque tenemos una larga historia de discrecionalidad, falta de transparencia y de rendición de cuentas de los gobiernos locales en este tema de los recursos. Yo conocí lugares donde en agosto ya no había merienda escolar”.
mem/apb
