La sede legislativa amaneció vallada y rodeada de efectivos y camiones de la Gendarmería.
A través de su perfil en la red social X, la diputada del Frente de Izquierda Romina del Plá denunció un “despliegue represivo brutal”.
“Cuadras y cuadras de (camiones) hidrantes de distintas fuerzas. El Congreso vallado siempre es síntoma de que se van a votar medidas anti-obreras. El amedrentamiento no impedirá la movilización popular en rechazo de la Ley Ómnibus”, señaló.
Organizaciones sociales, sindicales y defensoras de los derechos humanos anunciaron que permanecerán en los alrededores mientras es tratado el proyecto que consideran dañino para todos los ciudadanos.
El paquete de normativas incluye aspectos muy cuestionados como la atribución de funciones legislativas al Ejecutivo y el establecimiento de la emergencia económica, previsional, de seguridad, defensa, tarifaria, energética, sanitaria, administrativa y social.
Además, elimina las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias; y permite renegociar o rescindir contratos de la administración pública.
Por otra parte, establece que “quienes dirijan, organicen o coordinen una reunión o manifestación que impidiere, estorbare o entorpeciere la circulación o el transporte público o privado o que causare lesiones a las personas o daños a la propiedad serán reprimidos con prisión de dos a cinco años, estén o no presentes”.
Del Plá aseguró que el proyecto es “un plan de guerra” contra los trabajadores y criticó el respaldo de los llamados diputados dialoguistas a un dictamen que no está terminado.
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