Los ataques con armas de fuego, además de las víctimas fatales, dejaron un número considerable de heridos de balas, a los que se suman 69 plagios, siete de ellos colectivos, decenas de casos de violación y robos a mano armada.
El colectivo de Défenseurs Plus pidió al gobierno del primer ministro, Ariel Henry, tomar medidas para garantizar la seguridad ciudadana, pues todos esos hechos constituyen violaciones flagrantes de los derechos humanos.
La Organización de Naciones Unidas (ONU) informó que en Haití en 2023 casi cinco mil personas perdieron la vida debido a la violencia de las pandillas.
El número de homicidios se duplicó con creces en el país el pasado año, según el informe de la ONU, cuyo máximo representante António Guterres manifestó estar “consternado por el asombroso nivel de violencia de las bandas, que sigue empeorando y está destruyendo las vidas de los haitianos, en particular en Puerto Príncipe”.
Una señal alarmante en 2024 es que la mayoría de las personas heridas fueron alcanzadas por balas perdidas en zonas fuera del enfrentamiento directo.
El Hospital Universitario Estatal de Haití y el Hospital Universitario de la Paz, atendieron a los lesionados con perforaciones en el pecho, en la zona abdominal y en las extremidades inferiores, incluso algunas que requerían amputación
Según las autoridades médicas, existen casos muy difíciles de tratar porque las balas hacen mucho daño, y los pacientes no siempre tienen los medios económicos para seguir el tratamiento, y a veces se opera con éxito, pero la persona muere en el postoperatorio porque no cuenta con los recursos financieros.
Ejemplo de ello fue un paciente que recibió un disparo en la región cervical, tenía una herida transfixiante con riesgo de daño vascular, los médicos querían salvarlo, pero carecía de dinero para pagar la intervención quirúrgica.
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