En una carta dirigida al Presidente del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas Omar Zniber Bissereth subrayó que la situación de inseguridad continúa poniendo en peligro la vida de los ciudadanos y los cimientos de la democracia.
A nombre de todas las organizaciones de la diáspora pidió la dimisión del primer ministro Ariel Henry que se muestra cada vez más incapaz de resolver la crisis del país.
“Queremos llamar la atención internacional sobre la multiplicación de los casos de secuestros y homicidios, la gobernanza de casi todas las ciudades del país por bandas armadas, la transformación de barrios en zonas sin ley”, expresó Bissereth.
Rechazamos la paralización de las actividades escolares, pero también el uso de las bandas criminales organizadas por el gobierno para reprimir a la población, enfatizó el secretario general del Sector Comprometido de la Diáspora.
En la misiva los grupos de la diáspora denuncian la laxitud y la complicidad del Estado ante las numerosas crisis que prevalecen en el país, a pesar de las manifestaciones populares organizadas para exigir una mejora para todos.
Califican sin precedentes esta situación y lamentan como las voces del pueblo son ignoradas por el gobierno actual.
Pedimos al Presidente del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas que tome medidas inmediatas para apoyar al pueblo en su llamado a una transición política.
El Sector Comprometido de la Diáspora solicita una vez más su intervención para evaluar la situación y brindar soluciones para aliviar el sufrimiento de Haití.
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