Según el director del centro hospitalario, Álvaro Galiana, aumentó el número de menores que llegan heridos de bala.
“Es algo que nos preocupa muchísimo”, aseguró Galiana.
Aseveró la necesidad de disponer de un bloque quirúrgico que atienda inmediatamente a un paciente que en general es “niño grave”.
“Y todo lo que implica de estrés y de exigencia del servicio al hospital», puntualizó.
Abundó que tales circunstancias se acompañan por «movimiento allí de gente que pregunta por el niño y no sabemos quiénes son, si están vinculados al problema de que el niño diga quién le tiró y quién no le tiró, de dónde vino”, explicó el director.
“Antes era excepcional dos o tres casos de niños con balas en el año, y hoy por mes tenemos siempre alguno”, afirmó.
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