Ante la prensa, Lewandowski citó el Complejo Penitenciario de Papuda como ejemplo y a la unidad federal de Brasilia, rodeada por una barrera de hormigón creada en su reforma, en noviembre de 2022.
Tales murallas se construyen a metros de los muros de las cárceles. Son más altas y, en el caso de Papuda, cuentan con cuatro torres de vigilancia alrededor del perímetro, para monitorear eventuales fugas.
Hasta la fecha, el Ministerio de Justicia no tiene plazo para el inicio de las obras ni una estimación del coste.
En este momento, la cartera trabaja en el proyecto de la edificación y los recursos vendrán del Fondo Penitenciario Nacional, evidentemente después del proceso licitatorio que la ley exige.
También Lewandowski anunció instalar reconocimiento facial en todas las cárceles para cualquiera que ingrese a la unidad, mejora del sistema de alerta y nombramiento de 80 nuevos policías penales federales aprobados en concurso.
El ministro comunicó asimismo que se modernizará el sistema de videovigilancia en las cinco prisiones.
Durante la fuga en el centro penitenciario de Mossoró (estado de Río Grande do Norte), ocurrida el 14 de febrero, algunas cámaras de seguridad estaban apagadas y comenzaron dos investigaciones al respecto.
La primera es un proceso administrativo para determinar la responsabilidad disciplinaria por la evasión, mientras que la segunda indagará acerca de posible facilidad para la salida de los detenidos.
Para Lewandowski, sin embargo, no hubo participación externa en a escapada. Mencionó que no había, por ejemplo, un vehículo esperando a los fugitivos, como ocurrió en huidas en otros establecimientos penitenciarios.
«Sabemos que hubo una serie de factores que causaron la fuga de estos detenidos. (…) Es como el accidente de un avión, cuando se estrella un avión, hay una serie de causas, como ha ocurrido en este momento», subrayó.
Estimó que las obras en la penitenciaria de Mossoró contribuyeron a la fuga, pues algunas herramientas utilizadas por los detenidos no estaban acondicionadas correctamente.
«La fuga se produjo un martes de carnaval, cuando finalmente la gente está más relajada», aseguró.
El exjuez de la Corte Suprema aludió a fallas en el diseño estructural de la prisión que contribuyeron a la escapada.
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