Reveló que hay un plan que se viene viendo con el Instituto Nacional Electoral (INE), por parte de la Secretaría de Gobernación y otros organismos federales, y aclaró que las dos candidatas a la presidencia tienen protección de la Secretaria de Seguridad Pública y de la Guardia Nacional.
Hay un equipo que las protege, y también en otros casos como ya explicara la secretaria de Seguridad Rosa Icela Rodríguez. No es solo la vigilancia con elementos de Guardia Nacional, sino mucho más allá, expresó.
Citó que es también que no haya falsedad en el manejo de la información, denuncias de las guerras sucias como estas contra Claudia Sheinbaum que cuesta mucho dinero con el uso de robots, pues no son personas las que deciden apodarnos narcopresidente o decirles cosas a Claudia.
Son equipos automatizados que se manejan desde oficinas y reproducen en poco tiempo millones de mensajes, y esas empresas que se dedican a eso, encargadas de ese trabajo mercenario, cobran muchísimo dinero, por esos son campañas millonarias.
Denunció que el bloque conservador de México hace esa guerra sucia y eso lo debería de investigar el INE. Yo solamente, dijo, denuncio para que la gente se informe, se blinde, aunque este bombardeo de mentiras, falsedades y calumnias, no camina porque el pueblo está protegido, no es fácil manipularlo.
Acusó a las oligarquías de buscar imponerse, oprimir, explotar y saquear; ya no solo usan las bayonetas, ya no son los golpes de estado, ahora lo que está de moda es lo que llaman las campañas mediáticas, golpes blancos.
Amlo explicó que México está en una situación especial pues casi todos los medios, radio, televisión, periódicos y revistas están en contra.
Nunca se había atacado tanto a un presidente como hacen ahora, desde Francisco I Madero y desde entonces no se había presentado algo como esto en los medios.
Los dueños de medios están enojados porque forman parte de la oligarquía y son beneficiados por la corrupción, no solo con la publicidad que se les pagaba muy bien, pero esa era la minucia.
Ellos tienen empresas constructoras o de otras cosas que se dedican a venderle al gobierno bienes, eran proveedores, hasta de medicina, a precios elevadísimos, 10 empresas de medicamentos de muy mala calidad y calidad le vendían al gobierno 100 mil millones de pesos al año (más de cinco mil 700 millones de dólares).
Pero ya no hay esos contratos y pasaron a ser medios opositores, de la noche a la mañana. críticos del gobierno cuando antes lo defendían.
ro/lma