Según destaca Naciones Unidas en el sitio digital dedicado a esta fecha, esos fenómenos afectan a los Estados de ingresos bajos y medianos de manera desproporcionada, particularmente en términos de mortalidad, personas heridas, desplazadas y sin hogar, y pérdidas económicas.
Por ello, el organismo multilateral aboga por mayor cooperación con el fin de crear capacidad para impulsar la resiliencia ante los desastres, los fenómenos meteorológicos extremos y otras amenazas naturales y provocadas por el hombre.
Los desastres, muchos de los cuales se ven agravados por el cambio climático, tienen un impacto negativo en la inversión en desarrollo sostenible, indica la web de la ONU.
Recientes reportes de la Organización Meteorológica Mundial señalan también que sin una acción real sobre el clima en los próximos 10 años, los fenómenos meteorológicos extremos serán abrumadores, especialmente para las naciones en desarrollo.
Desde 1989, la ONU conmemora el Día Internacional para la Reducción del Riesgo de Desastres, después de un llamado de la Asamblea General a promover una cultura global sobre este tema.
La idea es impulsar acciones para reducir la exposición de las personas y los comunidades a los desastres y crear conciencia sobre la importancia de controlar los riesgos a los cuales se enfrentan en ese sentido.
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