De acuerdo con recientes estimaciones, casi 23 millones de afganos tendrán que atravesar tal situación este mes y también durante el primer trimestre del año venidero, indicó el vocero.
Además, recalcó, los colegas en el terreno indican que los enfrentamientos aislados y la violencia que han afectado a la población civil y resultaron en numerosas víctimas, aún continúan esta semana.
En Jalalabad, provincia de Nangarhar, los disparos contra las autoridades de facto provocaron la muerte de dos niños el 1 de noviembre, y la detonación de un artefacto explosivo improvisado al borde de la carretera mató a dos civiles el 3 de noviembre, detalló Haq.
La víspera se informó de enfrentamientos armados en la provincia de Bamyan, que resultaron en cinco personas heridas, incluido un civil.
Mientras tanto, varias agencias de ONU mantienen su trabajo sobre el terreno, pese a las difíciles condiciones de seguridad y acceso.
El pasado miércoles, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO por sus siglas en inglés) inició la campaña de distribución de semillas de trigo y fertilizantes de la temporada de otoño en el oriente del país.
Asimismo, planificó sesiones de formación técnica sobre las mejores prácticas agrícolas y espera llegar a casi 140 mil personas en las provincias de Nangarhar, Kunar, Laghman y Nuristan.
La FAO ha mantenido sus labores de distribución de ayudas alimentarias a familias necesitadas en numerosas regiones del territorio afgano.
El llamado humanitario de la ONU para Afganistán solo cuenta en la actualidad con un financiamiento del 54 por ciento, mientras que el organismo multilateral pidió el apoyo de los donantes internacionales para llegar a los 606 millones de dólares necesarios con el fin de brindar asistencia a 11 millones de personas.
La crisis humanitaria en ese país se agravó tras la salida intempestiva de las fuerzas de Estados Unidos y el retorno al poder del movimiento Talibán en agosto último, que provocó el desplazamiento interno y hacia el exterior de millones de afganos para huir de la violencia y del caos generalizado.
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