Romero resaltó en el acto, realizado en la sede del TSE en La Paz, que las ideas de los aspirantes podrán ayudar a reforzar la democracia y la gestión pública, muy criticada durante el gobierno de facto que imperó en el país tras el golpe de Estado en noviembre de 2019 contra el entonces presidente constitucional Evo Morales.
Un total de cuatro mil 962 cargos serán elegidos este domingo, entre gobernadores, subgobernadores, asambleístas departamentales, alcaldes, concejales, corregidores y otros representantes locales.
Más de 7,1 millones de ciudadanos están habilitados para acudir a las urnas este domingo en una jornada de votación con fecha de cierre a las 17:00 hora local.
Los ganadores, unods casi cinco mil ciudadanos elegidos, deberán gobernar igual, asumiendo que el ejercicio del poder es solo saludable en el marco de la institucionalidad, con contrapesos, límites legales y éticos, y siempre con el horizonte en alto, subrayó el titular del órgano electoral.
Ante las representaciones políticas, las misiones de observadores internacionales y autoridades nacionales, el vocal repasó el proceso complejo que le tocó regir luego de las elecciones anuladas de 2019, la convocatoria a nuevos comicios generales, la crisis sanitaria, entre otros problemas derivados del golpe de Estado.
Recordó que varias figuras pidieron el aplazamiento del sufragio debido a la emergencia sanitaria por la Covid-19 y destacó a Bolivia como el primer país del mundo en organizar dos elecciones de cobertura general en la época más difícil de la pandemia.
Una vez finalizada la votación termina el ciclo electoral boliviano tras reconstruir la legalidad y legitimidad de los poderes Ejecutivo y Legislativo, así como las instancias departamental, regional y municipal, remarcó Romero.
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