Asimismo, renovó el llamado a las autoridades de facto y las fuerzas de seguridad para que actúen con moderación y se abstengan de cometer más violaciones de derechos humanos.
Tras el reciente golpe y la ola de protestas en Jartum y otras ciudades sudanesas, la ONU ha visto una vez más a las autoridades hacer un uso excesivo de la fuerza contra manifestantes, como ocurrió la víspera, indicó el vocero.
Esas acciones supuestamente provocaron la muerte de unas 15 personas, mientras la cifra exacta de heridos aún no se confirma, añadió.
De esta forma, se eleva el número de muertos de manifestantes civiles pacíficos a 37 desde el comienzo de las protestas contra el golpe de Estado del pasado 25 de octubre, indicó Dujarric.
La libertad de expresión y reunión son derechos humanos fundamentales otorgados a todos los sudaneses y ellos deben tener la oportunidad de manifestarse pacíficamente y sin temor a represalias, subrayó el portavoz.
Todos los detenidos como consecuencia de las protestas y desde el golpe del 25 de octubre deben ser liberados, agregó.
Organizaciones cívicas en Sudán denunciaron hoy los choques de ayer entre policías y manifestantes en Jartum, que dejaron más de 10 fallecidos y unos 80 heridos.
El Comité de Médicos de ese país señaló que se registran muertes en la ciudad de Bahri, Omdurmán y la capital.
Con anterioridad la Asociación de Profesionales Sudaneses y el propio ente de galenos denunciaron que las fuerzas de seguridad arremetieron contra los inconformes con armas de fuego y gases lacrimógenos.
Por su parte, la policía indicó que, en las acciones cívicas callejeras ocurridas en las últimas horas, resultaron lesionados 90 agentes de seguridad y 30 civiles.
En Sudán, donde gobierna un Consejo Soberano de Transición, tras el golpe de estado militar de octubre, miles de personas exigen la vuelta de un Ejecutivo civil, que se restaure la Constitución y se liberen los presos políticos detenidos.
Fuentes humanitarias también advierten de una acentuada crisis económica con elevada inflación en ese territorio africano, escasez de alimentos y altos precios de los combustibles y medicamentos.
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