Al intervenir en la séptima edición de la conferencia “Roma Med-Diálogos Mediterráneos”, organizada por la cancillería italiana y el Instituto de Estudios de Política Internacional, el jefe de gobierno puntualizó que esa cifra es seis veces superior a la registrada en 2019.
Draghi apuntó que Italia continúa promoviendo un enfoque europeo de ese fenómeno, basado en la gestión colectiva con un equilibrio efectivo entre responsabilidad y solidaridad.
Queremos actuar de conjunto para prevenir los flujos ilegales y proteger los más débiles a través de la promoción de corredores humanitarios desde los países más vulnerables, precisó al pronunciarse a favor de “reforzar los flujos legales que son un recurso y no una amenaza para nuestras sociedades”.
Estrechamente ligada a la gestión de la migración está la estabilidad de los países de tránsito y origen respecto a lo cual, dijo, Italia apoya con convicción el proceso de transición política y la pacificación de Libia incluidas las elecciones previstas el 24 de diciembre próximo en esa nación norafricana.
En el mismo sentido se refirió al compromiso italiano con el resto del Magreb y el Sahel, territorio “donde aumentamos en modo significativo nuestra presencia y donde participamos en diferentes misiones en el ámbito de la Unión Europea y las Naciones Unidas”.
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