Las delicadas condiciones económicas y de vida por las que atraviesa el pueblo son una consecuencia directa de las medidas coercitivas unilaterales impuestas por Estados Unidos y algunos países occidentales, dijo durante su encuentro en esta capital con Jan Egeland, secretario general del Consejo Noruego para los Refugiados.
Agregó que aún los países occidentales tratan el expediente de los refugiados desde una perspectiva negativa sobre la base de falsos pretextos que no los incentiva a volver su país.
El gobierno tomó varias medidas y ofreció facilidades a fin de crear condiciones propicias que aseguran regreso voluntario y seguro, aclaró el jefe de la diplomacia.
Llamó a los países involucrados en este expediente a alejarse de la politización y cumplir con las normas de la acción humanitaria.
Instamos al Consejo Noruego para los Refugiados y a todos los organizamos internacionales y humanitarios que hagan todos los esfuerzos posibles para aliviar el sufrimiento de los refugiados y facilitar su regreso a su país.
Las autoridades sirias anunciaron recientemente que su labor conjunta con Rusia contribuyó al regreso de dos millones 325 mil desplazados a sus hogares.
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