Las estadísticas reflejan que este tipo de cáncer es uno de los más agresivos cuando se detecta de forma tardía y el padecimiento figura como uno de los 10 más frecuentes en la población masculina costarricense, con una tasa de casi dos fallecidos por 100 mil habitantes.
Mientras, su incidencia en las mujeres ticas es de 3,77 por cada 100 mil féminas, señala el estudio.
Especialistas consultados por el informativo digital CRHOY.com coincidieron en que el leve incremento de los casos de este tipo de cáncer en el país está directamente relacionado con los pésimos hábitos de los costarricenses, pues no atienden indicadores de su posible presencia como estreñimiento, hemorroides constantes y molestias gastrointestinales al defecar.
Para evitar esta mortal enfermedad, los expertos recomiendan ingesta de agua, una alimentación balanceada y ejercicio físico y, sobre todo, acudir al médico ante cualquiera de los indicadores mencionados.
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