El integrante de la Comisión de Seguridad Nacional y Política Exterior del Parlamento iraní, Jalil Rahimi Jahanabadi, apuntó en un mensaje por las redes sociales que los vínculos comenzaron a reactivarse.
“Con tales movimientos, suscribió, se registrará un aumento de la cohesión en el mundo musulmán”.
Las dos principales economías de la comunidad islámica rompieron relaciones diplomáticas en enero de 2016, tras un asalto masivo a la legación saudita en Teherán por la ejecución en el reino del destacado clérigo chiita Nimr Baqir al-Nimr.
Desde abril último, los dos pesos pesados de Medio Oriente celebraron cuatro rondas de conversaciones dedicadas a mejorar los lazos, calificadas de positivas y constructivas por el canciller iraní, Hossein Amir Abdolahian.
El jefe de la diplomacia del país de los persas expresó que Teherán está dispuesto a restablecer las relaciones con Riad en cualquier momento, y añadió sobre el entusiasmo de Irán por la posible reapertura de embajadas y consulados.
A su momento el ministro saudita de Asuntos Exteriores, el príncipe Faisal bin Farhan Al Saud, confirmó el deseo de su país de reparar las relaciones bilaterales.
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