En su intervención virtual ante el Foro Económico Mundial (conocido como Foro de Davos), el titular se refirió también a los desafíos del mercado laboral, las continuas interrupciones en la cadena de suministro, el aumento de la inflación y las trampas de deuda que se avecinan.
“Los últimos dos años han demostrado una verdad simple pero brutal: si dejamos a alguien atrás, dejamos a todos atrás”, recalcó.
También afirmó que existe una falta de acción en lo relacionado con la solidaridad global y hay una incapacidad para apoyar a los países en desarrollo en su hora de necesidad.
En ese sentido, el diplomático portugués solicitó a la comunidad empresarial mundial su apoyo, ideas, financiamiento y voz para enfrentar la pandemia con equidad y justicia, comenzando con lograr una mejor distribución de las vacunas contra la Covid-19.
Asimismo, subrayó la necesidad de reformar el sistema financiero global para que funcione para todas las naciones.
De acuerdo con el máximo representante de Naciones Unidas, hay tres áreas fundamentales en las cuales deben concentrarse los esfuerzos internacionales en materia de recuperación.
La primera, dijo, es enfrentar la pandemia de la Covid-19 y la segunda, es impulsar una acción urgente es el sistema financiero global.
Como tercer punto habló de la acción climática en los países en desarrollo: incluso si todas las naciones desarrolladas cumplen sus promesas de reducir drásticamente las emisiones contaminantes para 2030, estás aún seguirán demasiado altas de cara a reducir el calentamiento global, dijo.
Debido a la pandemia, el Foro Económico Mundial canceló por segundo año consecutivo su reunión anual en Davos, Suiza.
En lugar de un encuentro presencial, optaron por una serie de sesiones plenarias y debates en línea bajo el lema de La Agenda de Davos.
A juicio de Guterres, el evento de este año se lleva a cabo “a la sombra de un período enormemente difícil para las economías, las personas y nuestro planeta”.
De acuerdo con estimaciones de Naciones Unidas publicadas la semana anterior, el mundo está saliendo de las profundidades de una crisis económica paralizante, pero la recuperación continúa siendo frágil y desigual.
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