A pocos días del inicio presencial del curso escolar en la capital colombiana, los estudiantes del prescolar al bachillerato de este centro docente, realizaron su primera actividad cultural y estuvo dedicada al hombre más universal de Cuba, cuya obra dedicó un gran espacio a los niños porque “son los que saben querer”.
En la sede C de este colegio de carácter público, adscrito a la Secretaría de Educación de Bogotá, ubicado en la localidad de Rafael Uribe Uribe, niños y maestros recordaron al Maestro con varias actividades didácticas, siempre con respeto a las normas de bioseguridad.
Desde los más pequeñitos hasta los más grandes tuvieron un acercamiento al pensamiento martiano por medio de frases llevadas en carteles que los propios estudiantes, con ayuda de sus padres y maestros, elaboraron.
Los niños leyeron, argumentaron según lo que entendieron de cada frase, y las profesoras precisaron con más detalles interpretativos, en virtud de uno de los objetivos de esta institución docente, la cual fundamenta su quehacer en el pensamiento humanista de José Martí.
El colegio promueve el respeto de los derechos humanos y la dignidad del ser, así como el mejoramiento de la calidad de vida y el progreso social a través del desarrollo de competencias cognitivas, comunicativas y ciudadanas, desde la perspectiva del aprendizaje significativo.
Muchos estudiantes, sobre todo los más pequeños, por primera vez tuvieron un acercamiento al apóstol de la independencia de Cuba, y qué mejor modo que una breve biografía de su vida contada por una de sus maestras como si fuera un cuento infantil sacado de los mejores libros.
DONDE EL BARRIO SE PIERDE EN EL HORIZONTE DE LADRILLOS ROJOS
La profesora Astrid Paipa, líder institucional del Proyecto Transversal Pensamiento Martiano, detalló que el colegio cuenta con cinco sedes que atienden a escolares con situaciones de vulnerabilidad debido al entorno en el cual viven.
Es una población que requiere atención, recursos y sobre todo de mucha disposición, carisma y vocación de servicio para estar con ellos, dijo la maestra a Prensa Latina en la sede C, desde donde se ve toda una gran barriada de casitas de ladrillos que se pierden en el horizonte de los cerros bogotanos.
“Tenemos padres con alto grado de analfabetismo que no podían colaborar y tampoco tenían herramientas tecnológicas para poder acceder a la información durante el tiempo de la pandemia, en el que las clases presenciales se suspendieron”, detalló.
Luego del retorno a las aulas, nos dimos cuenta que la situación era grave por el aislamiento, lo cual trajo como repercusión pocas experiencias e interacciones entre los estudiantes y como los padres trabajan, no podían atender las necesidades de los niños como hacer tareas.
Al llegar a este curso, ahora muchos de los estudiantes, sobre todo los de esta sede cuyas edades oscilan entre cuatro y nueve años, están comenzando a entender cómo es el trabajo en grupo, comportarse y tomar medidas contra la pandemia. La celebración del 169 aniversario del natalicio de José Martí fue la primera actividad que hicieron en colectivo.
El haber hecho un esquema para ver a esta figura histórica representada fue una ayuda visual, sin embargo, las lecturas que harán cuando avancen en edad, conocimientos y en las enseñanzas de Martí, seguro les dejará un legado mucho más profundo, subrayó.
Nuestro lema es Educamos para la Libertad y esa libertad va dada en esa capacidad que tiene el niño para poder, a través de lo que lee e interpreta, ser diferente a los demás en el contexto difícil en cual vive.
CÁTEDRA MARTIANA
La coordinadora de la sede C del colegio José Martí, Martha Dávila, explicó a Prensa Latina que en la escuela los maestros tratan de mencionar la figura del apóstol en todo momento.
Nosotros tenemos una cátedra llamada Pensamiento Martiano, por medio de la cual los docentes se reúnen para profundizar en la vida y obra del Maestro y a su vez impartir esos conocimientos a los estudiantes. Muchas veces compartimos frases del Héroe nacional de Cuba, por su belleza y significado, tratamos de llevarlas a la vida diaria tanto de niños como maestros, subrayó.
Por su parte Diana Romero, docente de grado quinto, agregó que en su condición de maestros tienen como fin lograr que los niños asuman de una u otra manera las características de José Martí: “se le hace énfasis en su carácter humanista, en su poder de pensar, de ser analítico, crítico”, puntualizó.
“Lo hacemos de manera transversal en todas las asignaturas y en todas las sedes del Colegio y vamos viendo cómo los ideales de José Martí se ven en la forma de actuar en los niños”, destacó.
EL COLEGIO
A finales de 2002, a raíz de un proceso de reorganización en el Distrito Capital, se dio paso a la integración de cinco centros para conformar una sola Institución Educativa, con una sola administración y un solo rector.
Más adelante el colegio consideró que se debía buscar un nuevo nombre y convocó a un concurso con toda la comunidad educativa; mediante acta en 2004 se asumió el de José Martí.
Quedó conformado por cinco sedes: A, Luis López de Mesa; B, Nazaret; C, Granjas de San Pablo; D, La Resurrección y E, Río de Janeiro. Cuenta con un escudo y bandera con la imagen del héroe cubano, así como un himno que refiere en una de sus partes:
“¡Oh! Martianos marchemos altivos / Hacia un horizonte feliz / Con trabajo y estudio en las aulas / Forjaremos un gran porvenir. // A Martí orgullosos debemos / El legado que al mundo dejó! / Y hoy sembramos semillas pensantes / Que a la patria brindan lo mejor.
“¡Oh! Martianos cantemos erguidos / Como el héroe valiente enseñó / Y a la isla debemos su gloria / ¡Salve! ¡Al líder que Cuba nos dio!
arb/otf
*Corresponsal de Prensa Latina en Colombia