Arbeleche defendió el programa económico del gobierno con el énfasis puesto en bajar el déficit fiscal, un alza del PIB del 4,5 y augurar para 2022 un ascenso del 3,5.
Reconoció que la recuperación “demoró en llegar” tras la crisis provocada por la pandemia, pero ya se está “en condiciones de decir que no solamente se llegó al nivel prepandemia, sino que se estima se superaron esos niveles sobre fin de año”.
En cambio, el intendente del departamento de Canelones, Yamandú Orsi, consideró que “el salario real ha caído, eso no se puede tapar, cualquier ciudadano lo ve en la calle, el poder de compra que tiene cada uno”.
Orsi dijo del gobierno que nos tiene acostumbrado a muchos anuncios, un maratón permanente de quienes están en la gestión e invitó “a ver cómo está la realidad a la vuelta de la esquina”.
La titular del Ejecutivo esgrimió el enfrentamiento del país a la Covid-19 y la campaña de vacunación para señalar que a pesar del “mayor gasto”, eso no impidió que se cumpliera con la meta fiscal de reducir gastos sociales en presupuestos.
Dos rendiciones anuales de cuenta en el Parlamento estuvieron rodeadas de críticas de instancias sociales que comparecieron y manifestaciones sindicales contra recortes que perjudicaron actividades institucionales y el poder de compra de trabajadores y jubilados y pensionados.
Desde finales de 2021 se registra en Uruguay una oleada de paros gremiales para recuperar salarios perdidos y negociaciones de convenios colectivos ante un nivel de inflación que supera ingresos familiares en hogares de trabajadores.
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