En un encuentro organizado por Nueva Economía Fórum, Simson opinó que la solución es desarrollar las energías limpias para evitar la dependencia externa y amplió que, antes de la pandemia de Covid-19, la Unión Europea (UE) pagaba unos 300 mil millones de euros en importaciones de gas natural, petróleo y otros combustibles.
La comisaria significó el papel de fuentes de generación como los gases renovables y el hidrógeno verde, y resaltó que España cuenta con las mejores condiciones para producirlo.
Igualmente, defendió las oportunidades que representa la transición verde para la recuperación económica, con unas previsiones que apuntan a la creación de un millón de empleos en la UE para 2030 en los sectores de la construcción y la industria.
Sobre la decisión de los miembros del bloque comunitario sobre apostar o no por las nucleares, Simson señaló que es un derecho de cada país identificar su matriz energética.
Desde el segundo semestre de 2021 los costos de la electricidad registran alzas sostenidas en la UE por razones como el reinicio de las actividades económicas tras las interrupciones ocasionadas por la Covid-19 y la escasez de inventarios de petróleo.
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