El nuevo informe trimestral de la financiera indica que ‘el reciente empeoramiento de la crisis sanitaria quizá interrumpa o retrase la recuperación de la actividad económica’.
Pese al pronóstico, el banco alertó que la perspectiva está condicionada a la evolución del proceso de reformas y los acomodos necesarios en la economía por parte del gobierno.
Tal vaticinio pasa por un crecimiento moderado en el primer semestre para después esperarse un repunte en la segunda mitad del año, teniendo en cuenta una probable disminución en la letalidad de la Covid-19 por el programa de vacunación masiva que frenaría la propagación del virus.
Las previsiones para la inflación este año rondan el cinco por ciento, cifra superior a la meta del 3,75 dentro del intervalo de tolerancia de 1,5 puntos porcentuales pronosticado por el banco.
En el reporte también se concibe una inflación de 3,5 por ciento en 2022 y 2023, superior a las predicciones realizadas en diciembre, cuando se proyectó una de 3,4 y 3,3 respectivamente para esos calendarios.
De igual manera se elevó la previsión de superávit comercial para 2021 a 70 mil millones de dólares, frente a los 53 mil millones del informe anterior.
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