El Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró una variación anual de 8,01 por ciento, en febrero, un aumento de 6,45 puntos porcentuales respecto al mismo mes de 2021, señaló Luis Fernando Mejía, director Ejecutivo de la Fundación para la Educación Superior y el Desarrollo.
Indicó que la inflación de alimentos que alcanzó 23,3 por ciento, es una cifra no vista en más de dos décadas.
Agregó, por medio de su cuenta en Twitter, que la inflación para los pobres y vulnerables está en el 9,7 por ciento.
En conferencia de prensa virtual, el codirector del Banco Central Roberto Steiner dijo hoy que el IPC anual estuvo muy lejos de la meta que estableció el banco emisor, de un tres por ciento.
«El dato de inflación (…) en febrero nos tomó por sorpresa a prácticamente todos y ciertamente me tomó por sorpresa a mí. Es un dato más malo de los que esperábamos y eso que esperábamos un dato elevado».
Steiner precisó que el incremento de los precios del petróleo «va a tener unas repercusiones que no son favorables para la economía colombiana».
Para Colombia esto tiene implicaciones en dos aristas: una favorable por el aumento de los ingresos por las exportaciones de petróleo.
«Pero, dijo el codirector, complica los vientos de cola porque puede generar consecuencias malas en el contexto global».
Sin lugar a dudas, el hecho que el alza del petróleo afecte la inflación en todo el mundo, también va a generar consecuencias para Colombia, detalló.
Agregó que no se puede perder de vista el tema de “cómo no trasladar el aumento del precio del petróleo al ciudadano de a pie”.
«Seríamos muy ilusos de solamente verle el lado positivo al aumento de los precios del petróleo», enfatizó el funcionario del Banco.
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