Las aulas en tres mil 102 colegios recibieron el lunes último a más de 950 mil estudiantes de los diferentes niveles de enseñanza con la presencialidad como reto, además de nuevas medidas de bioseguridad tras dos años de la pandemia de la Covid-19.
Para la ministra de Educación, Maruja Gorday, especial atención brindarán a los alumnos que llegan a tercer grado de la primaria; y también a quienes inician la enseñanza preuniversitaria.
La funcionaria explicó que clases de alta calidad se deben garantizar también en las comarcas indígenas.
En los últimos siete días, trascendió además que el jefe de Estado, Laurentino Cortizo, aprovechó los actos centrales por el 8 de marzo para impulsar proyectos como el del nuevo Ministerio de la Mujer, iniciativa dirigida a fortalecer el empoderamiento de quienes asumen un rol decisivo en la sociedad, aseveró.
Al intervenir en el Primer Foro Regional “Mujeres de Impacto”, organizado por la Fundación Podemos y la Asamblea Nacional (Parlamento), el gobernante precisó que la nueva cartera de su gabinete devendrá una adecuación de estructuras y recursos que signan al actual Instituto Nacional de la Mujer.
Mientras, del otro lado de la ciudad, en el capitalino parque Belisario Porras, activistas femeninas y diputadas independientes promovieron una multitudinaria marcha hasta la Asamblea Nacional (legislativo) para reclamar justicia en los casos de una menor embarazada y de denuncias de esterilizaciones forzadas a indígenas de la comarca Ngabe Bugle.
Una investigación paralela sobre estos últimos hechos lleva adelante la oficina del Defensor del Pueblo, Eduardo Leblanc.
A juicio del Ombudsman, si las esterilizaciones forzadas son ciertas se trata de un retroceso como país.
Por su parte, el secretario general de Confederación Nacional de Unidad Sindical Independiente (Conusi), Marcos Andrade, adelantó a Prensa Latina que habrá una huelga nacional en 20 días si no prosperan nuevas negociaciones con la Cámara Panameña de la Construcción (Capac) sobre el incremento salarial y cuyo objetivo es mejorar las condiciones de los obreros.
La Capac no reacciona debidamente frente a la reducción sensible del poder adquisitivo de los trabajadores ante el encarecimiento del costo de la vida y la canasta básica, debido a la inflación primero con la Covid-19 y ahora agravada como consecuencia del conflicto bélico entre Ucrania y Rusia, explicó el dirigente sindical.
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