Los protestantes gritaron consignas pidiendo la renuncia del mandatario ante el agravamiento de la crisis económica sin precedentes en la nación insular.
Según el portavoz de la policía, Nihal Thalduwa, fueron incendiados varios vehículos de las fuerzas de seguridad, entre ellos un autobús del ejército y otro de la policía, dos motocicletas y un jeep, señaló el portal Ceylon Today.
Un total de 37 personas resultaron heridas y fueron ingresadas en el Hospital Nacional de Colombo, entre ellos cinco agentes de la policía, 14 miembros de las Fuerzas Especiales, tres periodistas y civiles.
Los gendarmes controlaron a la multitud disparando gases lacrimógenos y cañones de agua, dijo Thalduwa.
La policía investiga las causas de que la protesta pacífica se volviera violenta, acotó.
Este viernes se programaron cortes de electricidad de 12 horas en Sri Lanka, mientras la gente enfrenta una aguda escasez de productos esenciales, combustible y gas de cocina.
Los manifestantes dirigieron su ira contra lo que perciben como una mala gestión del gobierno de Rajapaksa, que agravó los problemas de divisas del país.
En otras partes de Sri Lanka, ciudadanos bloquearon las carreteras y quemaron neumáticos, en señal de protesta por el mal manejo de la crisis por parte del Ejecutivo.
Rajapaksa sostiene que la crisis de divisas no fue obra suya y la recesión económica en el país se debe en gran medida a la pandemia, pues los ingresos del turismo y las remesas disminuyeron por esta causa.
También, Colombo calificó de acto terrorista la violenta manifestación cerca de la residencia de Rajapaksa y culpó del incidente a elementos extremistas vinculados a partidos de la oposición.
jcm/abm
