Radicados en el Museo de Historia Natural de la Universidad de Berna, Suiza, los expertos precisaron mediante un comunicado que esta última caza sus presas en arbustos y árboles del sur de Brasil, Uruguay y alrededores de Buenos Aires, Argentina.
Pertenece a la familia de las arañas saltadoras (Salticidae) y el nombre -Guriurius minuano- honra al grupo étnico ahora extinto del pueblo Minuane, que vivía en la misma área donde fue descrita por la brasileña Kimberly S. Marta y colegas.
«Estamos a mitad de camino”, afirmaron los editores y destacaron que la primera representación científica de una araña llegó en 1757, por lo cual los especialistas tardaron 265 años en encontrar 50 mil especies.
Sin embargo, señalaron, la velocidad a la que se detallan nuevas especies va en constante aumento, y se cree que la comunidad internacional tardará menos de un siglo en hallar la otra parte de las especies de arañas del mundo.
La literatura científica relacionada con la taxonomía (que describe, nombra y clasifica organismos) de las arañas está incluida en el WSC y está disponible gratuitamente en www.wsc.nmbe.ch desde 2014.
Las arañas son los depredadores más importantes en los hábitats terrestres, y su impacto ecológico no debe subestimarse: al consumir entre 400 y 800 millones de toneladas de insectos cada año.
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