París precisó que la UE aplicará un embargo a las importaciones de carbón procedentes de Rusia, país que en febrero lanzó una operación militar en Ucrania, tras acusarla de agredir a las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y Lugansk, cuya independencia Moscú reconoció.
La prohibición relacionada con el carbón entrará en vigor en agosto, 120 días después de publicada mañana en el diario oficial de la UE, que depende energéticamente de manera importante del gigante euroasiático, de donde procede casi la mitad del carbón que consume y hasta un 40 por ciento del gas.
Otras sanciones divulgadas por Francia en las redes sociales reflejan la interdicción de exportar a Rusia bienes de alta tecnología y nuevas limitaciones para bancos de ese país, el cual acusa a occidente de utilizar a Ucrania como punta de lanza para extender la presencia de la OTAN en Europa del este.
Asimismo, anunció que la UE cerrará sus puertos a las embarcaciones rusas, como parte del quinto paquete de medidas destinadas a estrangular a Moscú, una cruzada que abarca los ámbitos político, financiero y comercial.
Se estima que las nuevas sanciones causarían a Rusia pérdidas por miles de millones de euros.
La justificación esgrimida por la UE esta vez es una alegada masacre cometida por tropas rusas en la ciudad ucraniana de Bucha, situada cerca de la capital Kiev, una acusación que Moscú niega y denuncia como un nuevo complot para satanizarla ante la comunidad internacional.
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