El equilibrio negativo en su balanza comercial de bienes y servicios estuvo impulsado por un marcado aumento de las importaciones, como señal de un apetito de los consumidores que no disminuye aunque la inflación registró un alza del 8,5 por ciento en el mismo mes.
Según los datos ofrecidos este miércoles, las importaciones crecieron un 10,3 por ciento respecto a febrero y se situaron en los 351 mil 500 millones de dólares.
Mientras, aunque no fue suficiente para equilibrar la balanza, las exportaciones también subieron un 5,6 por ciento, hasta los 241 mil 700 millones de dólares.
Por países, el déficit comercial de bienes con China subió siete mil 400 millones de dólares y llegó a un valor de 48 mil 600 millones, y con la Unión Europea se situó en los 15 mil 600 millones de dólares.
Estados Unidos también tuvo balances negativos con Canadá (10 mil 300 millones de dólares), Japón (seis mil 100 millones) y Taiwán (cuatro mil 900 millones).
Por el contrario, marcó superávits con Sudamérica y Centroamérica (seis mil 700 millones de dólares de superávit), Hong Kong (mil 300 millones), Brasil (mil 200 millones) y el Reino Unido (500 millones). Según un análisis por sectores, las exportaciones de material y suministros industriales al resto del mundo aumentaron en marzo en siete mil 400 millones de dólares, mientras que las importaciones por este mismo concepto se situaron en 11 mil 300 millones.
Con los datos presentados hoy por la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio, el déficit comercial de los Estados Unidos durante el primer trimestre del 2022 se amplió hasta los 84 mil 800 millones de dólares, un 41,5 por ciento más que en el mismo período del ejercicio anterior.
Según expertos, el fuerte aumento de las importaciones estadounidenses en el primer trimestre contribuyó en gran medida a la caída de 1,4 por ciento del producto interno bruto (PIB). Las exportaciones netas recortaron 3,2 puntos porcentuales del PIB del primer trimestre.
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