Según la plataforma, mientras el país sucumbe en la violencia el Core Group, integrado por embajadores de varios países, así como representantes de la ONU y la OEA, se mantiene en silencio.
La organización sociopolítica también criticó la inacción del Gobierno ante la creciente inseguridad, y el establecimiento de los grupos armados que ya cobró la vida de cientos de personas, y obligó a decenas de miles a abandonar sus casas y pertenencias sin tener lugares donde refugiarse.
“El gobierno no muestra ninguna voluntad de desmantelar las bandas armadas”, deploraron en un comunicado y criticaron la dotación asignada en el nuevo presupuesto a la Policía, el cual, estiman, no permitirá a la institución frenar la inseguridad.
Para denunciar estos males, convocaron a una sentada el próximo miércoles frente a la embajada francesa e invitaron a todos los sectores de la vida nacional a unirse a esta iniciativa.
Las pandillas tomaron fuerza en Haití en los últimos años, y acrecentaron el fenómeno del secuestro especialmente en los barrios vulnerables de Puerto Príncipe, prácticamente sin resistencia policial.
Además, los enfrentamientos hostiles de estos grupos provocaron cientos de muertes en el último año y desplazaron a más de 30 mil personas. El ejemplo más reciente ocurrió a finales de abril cuando las bandas 400 Mawozo y Chen Machan fueron a la guerra con un saldo de al menos 96 civiles fallecidos.
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