Fabrizio Curcio, jefe del Departamento de Protección Civil, precisó que este invierno descendió un 70 por ciento el volumen de nieve y por estos días de fuerte calor las lluvias aportaron entre un 40 y un 50 por ciento menos de agua que el promedio de los últimos años,
Curcio informó a la prensa que entre las medidas que se valoran se encuentra aplicar cortes al suministro de agua en las localidades del país más afectadas, para salvaguardar este recurso vital, según señalan la agencia AGI, el diario Il Giorno y otras publicaciones.
“Los criterios se están definiendo con las Regiones y sobre todo las medidas y creo que en los próximos días, a más tardar en las próximas semanas, tendremos disposiciones claras que informaremos”, agregó.
Por su parte Antonio Sano, director de Il Meteo, alertó sobre los efectos de la ola de calor que se mantendrá por largo tiempo, agravada por el anticiclón africano Caronte, que puede provocar temperaturas superiores a los 40 grados y alcanzar récords en el sur de la nación.
En los últimos seis meses nueve mil hectáreas de terreno fueron arrasadas por incendios en Italia, según reportes del Sistema Europeo de Información de Fuegos Forestales (Effis), más del doble de la media histórica.
La Confederación Nacional de Agricultores (Coldiretti) afirmó que esta situación, motivada por el cambio climático, es dramática y precisó que entre las regiones más afectadas por las llamas se encuentran las de Apulia, Toscana, Lazio y Emilia Romagna.
En algunas zonas la sequía y la ola de calor “tienen un impacto absolutamente importante en la agricultura, producción de pescado y electricidad”, manifestó Curcio.
“El problema es generalizado a nivel nacional”, añadió, “pero tenemos zonas especialmente afectadas como la cuenca del Po, los Alpes orientales y algunas del centro”.
Ante este complejo panorama el ministro de Agricultura italiano, Stefano Patuanelli, reconoció recientemente que “durante veinte años no se ha hecho nada en este país para proteger el recurso hídrico”.
Patuanelli, militante del Movimiento 5 Estrellas, apuntó la necesidad de emprender tareas urgentes para resolver estructuralmente el tema del uso del agua, entre ellas la implementación “de un plan sobre los embalses”.
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