Los centros urbanos están ahora ‘en la primera línea’ de la crisis climática: emiten más del 70 por ciento de los gases de efecto invernadero mundiales y enfrentan riegos como el aumento del nivel del mar y fenómenos climáticos extremos advirtió.
En su mensaje a la reunión del Grupo de Liderazgo Climático C40, el titular convocó a revolucionar la planificación urbana y el transporte en las ciudades para hacer frente a esos impactos y construir un futuro verde y sostenible.
Asimismo, llamó a crear estrategias y políticas más efectivas, especialmente a medida que avanza la recuperación de la pandemia de Covid-19.
‘La inversión en recuperación es una oportunidad generacional para poner la acción climática, la energía limpia y el desarrollo sostenible en el centro de las estrategias y políticas de las ciudades’, subrayó.
Según apuntó el secretario general, la forma en que se diseñen la generación de energía, el transporte y los edificios en los centros urbanos será decisiva en la ruta hacia el logro del Acuerdo de París sobre el cambio climático y los Objetivos de Desarrollo Sostenible.
Por ello, pidió a los alcaldes que conforman la alianza C40 trabajar con las autoridades de sus países para desarrollar y presentar contribuciones determinadas a nivel nacional antes de la Conferencia sobre Cambio Climático de Naciones Unidas, a celebrarse en noviembre próximo en Glasgow, Escocia.
También los instó a utilizar la recuperación de la pandemia con el fin de acelerar la inversión y la implementación en sistemas de transporte e infraestructura limpia y ecológica.
En estos momentos, urge poner fin al uso de carbón, recalcó Guterres y consideró esto como el paso más importante para garantizar que el aumento de la temperatura global se limite a 1,5 grados Celsius.
A juicio del titular, al menos el 80 por ciento de la generación de energía en las ciudades debe provenir de fuentes de energía renovables para 2030.
C40 es una red constituida por un grupo de ciudades que aúnan esfuerzos de cara a reducir las emisiones a la atmósfera, adaptarse al cambio climático y acelerar la transformación hacia una sociedad resiliente y descarbonizada.
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