Los oficiales encontraron siete pistolas, seis cargadores y 434 cartuchos, precisó la Asociación General de Aduanas en un comunicado.
Se trata de la tercera incautación de armas en lo que va de mes, dos de estas en Port de Paix.
Por el momento nadie fue detenido, dijo al diario Le Nouvelliste el director departamental de la Policía en Noroeste, Bruce Myrthil, aunque señaló que existe una sinergia entre las entidades estatales para luchar contra el crimen organizado y bloquear el contrabando de estos artefactos.
Myrthil reconoció que las recientes operaciones permitieron develar la complicidad de las tripulaciones de barcos que fondean en el muelle de Port-de-Paix en el tráfico de armas y municiones entre Estados Unidos y Haití.
La semana pasada otro escándalo de tráfico de armas salpicó a la Iglesia episcopal de Haití luego que se descubriera un cargamento con una veintena de armas automáticas, 20 mil cartuchos, seis pistolas y 120 cargadores de varios calibres en el puerto de la capital.
La carga estaba a nombre de la entidad religiosa y la Policía apresó a un administrativo que usualmente retiraba del puerto los contenedores pertenecientes a esa institución.
La Iglesia episcopal negó estar implicada y aclaró que no tienen pedidos de contenedores, ni realizaron ninguna gestión para su retiro del puerto de la capital, así como tampoco esperan la llegada de depósitos desde el extranjero. También el 1 de julio agentes de aduana el Port de Paix confiscaron 120 mil cartuchos en 157 estuches, tres armas cortas, 30 cargadores y 20 estuches de fusil Ak-47, así como de tres mil 890 dólares y 814 mil 343 gourdes (poco menos de siete mil 100 dólares).
El pasado miércoles, en una alocución a propósito de su primer año en el cargo, el primer ministro, Ariel Henry, elogió las recientes incautaciones y aseguró que su Gobierno tiene entre sus objetivos la lucha contra el contrabando.
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