El informe de la oficina de la Coordinación Humanitaria en Haití también da cuenta de incidentes graves de violencia sexual contra mujeres y niñas, así como contra menores reclutados por las bandas para integrar sus filas.
Los hechos tuvieron lugar durante la reciente guerra que comenzó el 8 de julio entre dos poderosas alianzas de pandillas que operan en Cité Soleil, un extenso barrio pobre de Puerto Príncipe.
La ONU indicó que al menos tres mil personas tuvieron que huir de sus hogares, incluidos cientos de niños no acompañados, mientras unas 140 viviendas fueron incendiadas o destruidas como consecuencia de los enfrentamientos.
En este contexto el organismo mundial comenzó a brindar asistencia a las víctimas con kits de higiene, agua potable y distribución de alimentos.
“Las necesidades humanitarias en Cité Soleil son inmensas y están creciendo debido a la pobreza, la falta de servicios básicos, incluida la seguridad, y un aumento reciente en violencia.
La ONU se compromete a continuar brindando ayuda a los niños, mujeres y hombres necesitados más vulnerables, de acuerdo con los principios de humanidad, neutralidad, imparcialidad e independencia”, dijo la coordinadora humanitaria, Ulrika Richardson.
Igualmente, subrayó la necesidad de encontrar un enfoque sostenible para el desarrollo de la localidad, lo cual debe incluir el retorno a una vida digna para sus habitantes.
La violencia se disparó en Haití en el último año tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse ocurrido en julio de 2021.
Actualmente las pandillas controlan cerca de un tercio del territorio capitalino, incluidos sus accesos norte y sur y en lo que va de año se registraron al menos 500 secuestros y una cifra similar de asesinatos en Puerto Príncipe.
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