Según el secretario de Educación, James Cleverly, los titulares de Hacienda y Negocios, Nadhim Zahawi y Kwasi Kwarteng, respectivamente, abordarán el destino de las ganancias “no planificadas” que están obteniendo esas compañías después que el ente regulador las autorizó a subir el precio de la tarifa energética a millones de usuarios.
El anuncio de la reunión llegó apenas 24 horas después de que el dimitente primer ministro Boris Johnson descartó tomar nuevas medidas para resolver la crisis, por considerar que ese es un tema a atender por quien lo reemplace en el cargo a partir de septiembre.
El periodista y defensor de los derechos del consumidor Martin Lewis consideró que dos miembros del gabinete se reúnan con las empresas eléctricas, pero aseveró que el Gobierno es el único responsable de tomar las decisiones para detener el riesgo “cataclísmico” que enfrentan millones de personas en el Reino Unido a partir del verano.
En opinión de Lewis, las autoridades británicas deben despertar y diseñar un plan de emergencia para lidiar con una situación que comparó con el inicio de la pandemia de Covid-19, cuando Johnson fue acusado de demorar la implementación de las medidas contra la propagación del coronavirus SARS-CoV-2.
Se prevé que el precio de la tarifa eléctrica aumente a tres mil 600 libras esterlinas anuales (más de cuatro mil 360 dólares) a partir de octubre, pero la consultora Cornwall Insight advirtió la víspera que para enero, el tope autorizado por el ente regulador podría llegar a cuatro mil 266 libras (más de cinco mil 100 dólares).
Durante la entrevista de este miércoles con la cadena Sky News, el ministro Cleverly se rehusó a confirmar reportes de que el Gobierno está planificando apagones durante el invierno para lidiar con la escasez de gas derivada de la guerra en Ucrania.
El funcionario se limitó a decir que el Reino Unido está en mejor posición que otros países en términos de producción de energía para el consumo doméstico.
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