Tras varias jornadas de huelga, la Asamblea General de la organización pidió mantener al sector bancario y la consolidación de la confianza en él como condición necesaria para reiniciar la rueda de la economía nacional.
De esta manera, la Asociación subrayó que la crisis sistémica en el país es resultado de políticas públicas y debe ser abordada mediante la elaboración de un plan integral para el avance económico, bajo la asistencia de los referentes internacionales competentes.
En este sentido, la entidad afirma el respaldo al acuerdo del Estado con el Fondo Monetario Internacional (FMI), como una de las exigencias principales externas para impulsar las reformas de la restauración.
La Asamblea decidió autorizar a su Junta Directiva a realizar los contactos para acelerar la expedición de normativas relacionadas con el plan de recuperación, en especial del FMI, entre las que aparecen la Ley de Control de Capitales y la Reestructuración Bancaria.
Su declaración demandó asegurar la capacidad de los querellantes, al amparo de las reglas de jurisdicción y las facultades de referencia judicial, así como la adopción de medidas cautelares contra personas y fondos en correspondencia con fundamentos jurídicos sólidos.
La Asamblea también solicitó establecer un tribunal especial para asuntos bancarios, similar al Tribunal Especial para Mercados Financieros, que requiere la designación de sus miembros.
En este escenario, políticos, diputados, sindicatos y federaciones criticaron las jornadas de paro de la Asociación de Bancos, al calificarlas de destructivas e irresponsables, ya que los fondos de los depositantes están en estas instituciones sin contabilizar hasta hoy.
Para el representante de la Federación de Cámaras Europeas de Expertos en Beirut, Nabil Bou Ghantous, la huelga constituyó un medio para eludir sus responsabilidades y obstruir el trabajo del poder judicial en la rendición de cuentas y la búsqueda de la verdad sobre los derechos de los depositantes.
El asesor político y económico denunció que los bancos se alejan de su papel de desarrollo y financiación de las actividades económicas en todos los sectores para convertirse en una asociación de prestamistas que devengan intereses.
Ante las decisiones anteriores, la Asociación de Bancos de Líbano convocó a evaluar a fines de agosto la implementación de las demandas presentadas en la Asamblea General.
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