Uno de lo puntos a tratar por Scholz es alejarse de las importaciones del gas ruso tras las sanciones impuestas por la Unión Europea al gigante euroasiático, medidas que se convirtieron en un bumeran para el viejo contiente al tensar el mercado mundial de los hidrocarburos.
En la cita a celebrarse en Noruega –actual principal proveedor de gas a Alemania- también participarán Dinamarca, Islandia, Suecia y Finlandia, estos dos ultimos, pendientes de ingresar en la Organización del Tratado del Atlántico Norte.
A mediados de marzo, el ministro alemán de Economía, Robert Habeck, visitó el país eslavo para intensificar la cooperación energética y valorar la posible construcción de un oleoducto para el transporte de hidrógeno desde Noruega hasta Alemania.
La última vez que la nación germana celebró una cumbre con los cinco Estados nórdicos fue hace tres años y centro su debate sobre el cambio climático.
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