Se trata de una legislación difícil, sensible y de gran alcance, que involucra a muchos sujetos y leyes y, de hecho, enfrenta numerosos obstáculos, enfatizó Minh Chinh al encabezar una reunión temática del Gobierno sobre la construcción legislativa, correspondiente al mes de agosto.
La Ley de Tierra (modificada) debe garantizar la institucionalización de las resoluciones al respecto emitidas por el Partido Comunista de Vietnam (PCV), ratificó el titular del Ejecutivo, quien enumeró algunos de los principales criterios a tomar en consideración a la hora de elaborar el proyecto legal.
En ese sentido, según reseñó la agencia de noticias VNA, exhortó a establecer los criterios y condiciones específicas para los casos de recuperación de tierras del Estado, y sugirió añadir en la ley actual las regulaciones sobre la limitación y control para las zonas estratégicas y sensibles de seguridad y defensa.
Orientó además promover la transformación digital y la aplicación de tecnología en la gestión de tierra, la lucha contra la corrupción y el despilfarro; continuar la descentralización y asignar recursos; e incrementar la supervisión para detectar oportunamente los problemas surgidos.
A fines de mayo último, al intervenir en el tercer periodo de sesiones de la XV legislatura, el jefe de la Comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento vietnamita, Hoang Thanh Tung, informó que el Gobierno había solicitado posponer el plazo de presentación del proyecto de Ley de Tierras.
Según el funcionario, el Comité Permanente de la Asamblea Nacional consideró urgente la modificación de esta legislación, vigente desde 2003, a fin de poder resolver algunas dificultades y obstáculos presentados durante la ejecución de la misma.
Además, para responder a la demanda de movilización y uso efectivo de este recurso natural para promover la producción y negocios, así como el desarrollo socioeconómico, y también para crear una base que permita abordar las limitaciones en otros documentos legales relacionados.
En una reunión anterior sobre este mismo tema, Minh Chinh aclaró una serie de principios fundamentales de cara a la revisión de este importante texto, incluida la garantía de armonizar los intereses del Estado, las personas y las empresas.
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