Alrededor de 200 colegios de la región occidental del país, cerrados desde el 2017 por ataques de rebeldes, reabrirán también sus puertas el próximo 5 de septiembre, después que el ministro de Defensa, Joseph Beti Assomo, garantizara la seguridad de los centros.
Las autoridades locales pidieron a los padres enviar a sus hijos a las escuelas y retornar a la normalidad, aunque alertó la necesidad de mantenerse alertas ante ciertos focos insurgentes en algunas zonas remotas.
Por otra parte, el gobierno ordenó a su ejército cerrar las escuelas comunitarias acreditadas por los separatistas que no respeten el calendario académico oficial y el plan de estudios preparado por la administración central en Yaundé.
En 2016, separatistas residentes en el oeste de habla inglesa de Camerún comenzaron protestas pacíficas contra su supuesta marginación por parte del Gobierno.
Las autoridades afrontaron las manifestaciones y el enfrentamiento degeneró en un conflicto armado en 2017,cuando los separatistas ordenaron el cierre de escuelas y transformaron algunas en campos de entrenamiento.
La rebelión derivó en la autoproclamación de la independencia de Ambazonia el 1 de octubre de 2017, una república no reconocida, y la formación de destacamentos guerrilleros.
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