En un mensaje transmitido en Twitter, el titular del organismo internacional enfatizó en que más de mil personas perdieron la vida por la catástrofe, mientras otros millones de habitantes fueron afectados.
Recordó a aquellos que quedaron sin hogar, así como a quienes vieron destruidas sus escuelas, instalaciones y medios fundamentales para subsistir.
“Esta crisis colosal requiere una acción colectiva urgente para ayudar al Gobierno y al pueblo de Pakistán en su hora de necesidad”, remarcó Guterres.
En esta jornada la ONU y el Gobierno de ese país asiático hicieron un pedido de 160 millones de dólares para actividades de socorro inmediatas.
De acuerdo con el portavoz del secretario general, Stéphane Dujarric, ya movilizaron unos siete millones de dólares, para una asistencia que incluye ayuda alimentaria, suministros y servicios médicos, agua potable, apoyo a la salud materna, vacunación del ganado y refugio.
El vocero añadió que el Fondo Central para la Acción en Casos de Emergencia de la ONU asignó tres millones de dólares para proporcionar alimentos, saneamiento y otros recursos a quienes más lo necesitan.
Las inundaciones en Pakistán, causadas por la temporada de lluvias monzónicas que comenzó el pasado junio, afectaron a más de 33 millones de personas y causaron la muerte de mil 136.
Según la Autoridad Nacional de Gestión de Desastres, al menos mil 634 personas resultaron heridas, perecieron más de 735 mil cabezas de ganado y fueron destruidas cerca de un millón de casas.
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