Uno de los eventos que más comentarios suscitó fue el discurso dado el pasado jueves por el presidente Joe Biden en Filadelfia en el que aprovechó para arremeter contra su predecesor Donald Trump (2017-2021).
Afirmó que tanto el magnate como sus acólitos siguen el camino del “semifascismo» al tiempo que atacó la ideología MAGA, una referencia al eslogan Make America Great Again (Hacer a los Estados Unidos grande otra vez), defendido por el republicano.
“Están trabajando en este momento, mientras hablo, en un estado tras otro para otorgar el poder de decidir las elecciones a los partidarios y compinches, empoderando a los que niegan las elecciones para socavar la democracia misma”, aseveró.
Acotó, no obstante, que no todos los conservadores abrazan lo que él denominó como una ideología extrema.
Aun así, algunos afiliados a la tolda roja no vieron con buenos ojos la alocución y el líder de la minoría de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthey, por ejemplo, solicitó al mandatario que se disculpara por llamar a los republicanos “semifascistas”.
“El presidente Biden opta por dividir, degradar y menospreciar a sus compatriotas. ¿Por qué? Simplemente porque no están de acuerdo con sus políticas”, dijo.
Otro de los eventos acontecidos durante la semana, y que a juicio de analistas podría repercutir en el imaginario de los votantes en las elecciones de mitad de mandato, fue la victoria lograda en Alaska de la demócrata Mary Peltola sobre los republicanos Sarah Palin y Nick Begich III.
Los comicios especiales celebrados en ese estado se celebraron para determinar quién ocuparía, durante lo que queda de año, el escaño legislativo dejado vacante en la Cámara de Representantes tras la muerte del conservador Don Young.
El panorama se ensombrece entonces para las aspiraciones de aquellos representados por el color rojo en dicho territorio, que buscan ganar el próximo 8 de noviembre un puesto en el Congreso hasta 2024.
En un contexto caracterizado por fisuras dentro del partido republicano, y el éxito de la Ley de Reducción de la Inflación impulsada por los demócratas para aumentar los impuestos y contraer el déficit federal, las encuestas alertan de un ligero repunte en los índices de popularidad del mandatario Joe Biden.
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