El sitio de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) anunció en un comunicado que “los observadores de estrellas pueden esperar excelentes vistas de Júpiter (…) cuando el planeta gigante alcance la oposición”.
Explicó que desde el punto de vista de la superficie de la Tierra, la oposición ocurre cuando un objeto astronómico sale por el este mientras el Sol se pone por el oeste, colocando al objeto y al Sol en lados opuestos de la Tierra.
En el caso del planeta más grande del sistema solar y el quinto en orden de lejanía al Sol, la oposición ocurre cada 13 meses, momento en que “parezca más grande y brillante que en cualquier otra época del año”.
Ocurrirá el acercamiento de Júpiter más cercano a la Tierra en los últimos 59 años porque ambos no giran alrededor del Sol en círculos perfectos, detalló el texto y argumentó que por ello los planetas se cruzarán a diferentes distancias a lo largo del año.
Precisó que rara vez coincide el acercamiento más cercano con la oposición lo que significará que “las vistas de este año serán extraordinarias”, auguró el texto.
Para Adam Kobelski, astrofísico investigador del Centro Marshall de Vuelos Espaciales de la NASA en Huntsville, Alabama, “Con buenos binoculares, las bandas (al menos la banda central) y tres o cuatro de los satélites galileanos (lunas) deberían ser visibles”.
Recordó que Galileo observó estas lunas con óptica del siglo XVII y apuntó que en la observación es clave una “montura estable para cualquier sistema que utilice”.
Recomendó en tal sentido un recomienda un telescopio grande para ver la Gran Mancha Roja y las bandas de Júpiter con más detalle; un telescopio de cuatro pulgadas o más grande y algunos filtros en el rango de verde a azul mejorarían la visibilidad de estas características.
Kobelski aseguró que “Las vistas deberían ser excelentes durante unos días antes y después del 26 de septiembre”, y en tal sentido recomendó, aprovechar “el buen clima a ambos lados de esta fecha para disfrutar de la vista. Fuera de la Luna, debería ser uno de los (si no el) objetos más brillantes en el cielo nocturno”.
El blog de la NASA significó que Júpiter tiene 53 lunas con nombre, pero los científicos creen que se han detectado 79 lunas en total.
Las cuatro más grandes, Io, Europa, Ganímedes y Calisto, se denominan satélites galileanos, en homenaje al hombre que las observó por primera vez en 1610, Galileo Galilei.
En binoculares o un telescopio, los satélites galileanos deberían aparecer como puntos brillantes a ambos lados de Júpiter durante la oposición.
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