El ministro esrilankés de Asuntos Exteriores pidió el sábado en el debate general de la 77 sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas la cooperación y el apoyo de la comunidad internacional mientras su país realiza reformas políticas, sociales y económicas.
Dijo que la campaña de vacunación de Sri Lanka contra la Covid-19 superó los objetivos de la Organización Mundial de la Salud, pero que el país es vulnerable a las consecuencias económicas de la pandemia y en ese sentido destacó la importancia de la cooperación multilateral a través de las redes sanitarias mundiales.
Al tratar los compromisos de Sri Lanka con los objetivos del Acuerdo de París y la meta de reducir las emisiones para lograr la neutralidad del carbono en 2050, instó a los mayores emisores de gases de efecto invernadero del mundo a cumplir sus obligaciones y ayudar a las naciones en desarrollo en las medidas de adaptación y mitigación.
«Como nación insular, estamos muy preocupados y somos sensibles al impacto de la contaminación y el cambio climático en los océanos y al uso sostenible de sus recursos», subrayó Sabry en su discurso ante el plenario de la ONU.
También, el representante diplomático esrilankés apoyó una transformación sostenible de la agricultura para garantizar la seguridad alimentaria, especialmente para los niños.
En otra parte de su intervención, señaló que los marcos acordados para el control de armas, la no proliferación y el desarme son frágiles y lamentó no haya todavía un resultado consensuado en la Décima Conferencia de Revisión de las Partes del Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares.
Reiteró la posición de principios de Sri Lanka de que el pueblo de Palestina tiene un derecho legítimo e inalienable a los recursos naturales de su territorio y a la condición de Estado.
Además, indicó que Sri Lanka es víctima del terrorismo desde hace varias décadas y pidió medidas legislativas y mecanismos de aplicación de la ley para luchar contra este flagelo y las ideologías radicales.
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