Según la especialista, las campañas de prevención registran resultados satisfactorios, con la ayuda de la cartera de Agricultura, sobre todo en las zonas rurales, para concientizar a las comunidades sobre la importancia de la vacunación.
Sin embargo, todavía hay desconocimiento y negligencias en relación con el control, la alimentación y la vacunación de los animales e insuficiente percepción de los riesgos por contagio, argumentó la jefa de sección de los Servicios de Vigilancia Epidemiológica del Ministerio de Salud, en declaraciones al Jornal de Angola.
Los 127 enfermos diagnosticados fallecieron debido a la letalidad de la patología y la llegada tardía a los centros asistenciales, sopesó.
En la provincia de Luanda, el hospital Pediátrico David Bernardino registró, de enero a diciembre del año pasado, 12 decesos por rabia, la mayoría de niños del municipio de Viana, con edades comprendidas entre los 3 y los 12 años, indicó el reporte.
De acuerdo con la fuente, el hospital notificó siete casos en lo que va de 2022, seis perdieron la vida y uno quedó sin desenlace conocido, pues el padre se llevó al menor de la instalación médica.
La jefa de los servicios de neuro-infectología del David Bernardino, Juliana Miranda, pidió la recolección de perros callejeros, pues muchos están infectados y recomendó que las personas con mascotas acudan a la vacunación regular, reseñó el periódico.
La mayoría de los menores, lamentó, llegan al Pediátrico en un estado muy avanzado de la dolencia; “por lo general, sobreviven durante dos o tres días y finalmente mueren», señaló la doctora, quien exhortó a incrementar la vigilancia en el seno de las familias.
Cada 28 de septiembre, la comunidad internacional celebra el Día Mundial contra la Rabia a fin de redoblar los llamados en materia de prevención y control sanitarios. mgt/mjm