Según los pronósticos, arribarán a territorio nacional más de cinco millones de visitantes foráneos, una cifra importante hacia la recuperación del sector tras los estragos causados por la pandemia de Covid-19.
Los preparativos con vista a la afluencia de vacacionistas internacionales incluyen el desarrollo, reemplazo y renovación de instalaciones turísticas, garantías de crédito, así como la reducción de los precios de entrada a museos y sitios arqueológicos, precisó la funcionaria ante los diputados de la Cámara de Representantes.
Otra iniciativa apunta al establecimiento de unos 15 hoteles ‘amigables con el medio ambiente’ en el marco de estimular el turismo verde, destacó.
En los balnearios del Mar Rojo y el sur del Sinaí, destinos preferidos por los ciudadanos europeos, priorizaron la vacunación de todos los trabajadores contra el coronavirus SARS-Cov-2.
Aeropuertos, agencias de turoperadores y el resto de la infraestructura en esos territorios, se han movilizado para cumplir con los estándares de seguridad requeridos.
El regreso inminente de los vuelos chárter procedentes de Rusia, anunciado por los presidentes Abdel Fattah El-Sisi y Vladimir Putin, devino inyección de optimismo para el sector, principalmente en las playas de Hurghada, Sharm El-Sheikh y Marsa Alam.
Por su parte, el Ministerio de Turismo y Antigüedades ha lanzado numerosas campañas para atraer viajeros extranjeros, a partir de la promoción del patrimonio. En tal sentido, una de las acciones más relevantes fue el Desfile Dorado de los Faraones (peregrinación de momias reales) celebrado el pasado 3 de abril.
La inauguración del Museo de la Civilización Egipcia y más adelante del Gran Museo Egipcio, constituyen otras de las grandes apuestas del gobierno para impulsar el turismo, un renglón estratégico para el país y sustento de miles de nacionales dentro de la economía informal.
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